La DGT planea controlar el tráfico con drones a partir de 2019
Los drones están llamados a convertirse, más pronto que tarde, en un factor clave para el control estratégico del tráfico. Y es que la Dirección General de Tráfico va a incorporar a su plantilla una flota de drones para facilitar los trabajos relacionados con la monitorización y el control del tráfico. La incorporación, que planea llevarse a cabo a partir ya del año que viene, en 2019, forma parte de un ambicioso Plan Estratégico de medios aéreos, que recoge también la incorporación de avionetas y la mejora de la flota de helicópteros.
El drone, la herramienta que aumentará la vigilancia aérea de la DGT
Según la DGT, la incorporación de aeronaves no tripuladas permitirá «importantes mejoras en la seguridad vial». A esto hay que añadirle un ambicioso gol de racionalizar el gasto de la administración, que añade drones para reducir el gasto. Y es que la versatilidad de los drones ofrece una gran relación calidad-precio, y permite llevar a cabo tareas de una forma más simple y rápida, de modo que los costes se reducen y, los riesgos, también.
La noticia llega poco después de que el Ministerio de Fomento promulgara un decreto según el cual se liberalizaba el uso de drones en España. Así, ya son las propias administraciones del Estado las primeras en aprovechar el cambio de normativa para implementar una nueva oportunidad tecnológica en sus quehaceres del día a día.
Los drones son una manera del organismo de complementar los medios aéreos de los que ya dispone, ampliando la actual cobertura de vigilancia aérea del tráfico en la carretera para una serie determinada de operativos, como pueden ser las conocidas operaciones salida u operaciones retorno que se organizan durante los festivos y los periodos de vacaciones. En concreto, el uso de drones parece que de momento se centrará en las vías interurbanas, para que los accidentes en estas vías se vean lo más limitados posible.
La inclusión de drones, una respuesta al aumento de la siniestralidad en las vías en 2017
La DGT también quiere que los drones sean una pieza clave del entramado necesario para detectar las conductas de riesgo en la carretera. De este modo, tanto las avionetas como las flotas de drones que se incorporen a partir de 2019 tendrán la capacidad de detectar, por ejemplo, excesos de la velocidad máxima permitida y, en consecuencia, multar.
Y es que el organismo público ha evidenciado que, durante los últimos doce meses, se ha producido un leve aumento de la siniestralidad en las carreteras españolas. En concreto, los accidentes de tráfico se han cobrado 1.200 muertes, con la tasa de mortalidad aumentando en un 3% con respecto a 2016, rompiendo así la tendencia a la baja que venía registrándose hasta ahora.
Todo ello supone el principal argumento de peso de la DGT para apoyarse en la inclusión de las nuevas tecnologías, como los drones, para tratar de evitar nuevos repuntes de accidentes y fallecidos.